El Viaje de Chihiro.
Ecología. La transmutación. El esfuerzo. El sacrificio. La entrega. El plano astral, el plano espiritual.
Esta vez quien nos da grandes lecciones es una niña japonesa: Chihiro. Podríamos decir que tiene unos 12 años, más o menos. La encontramos en un carro, abrazando unas flores, junto a ella están su mama y su papa. Ella esta triste y de mal humor, porque se mudan y tienen que dejar su vida conocida atrás. Se aferra a las flores como el recuerdo de lo que no volverá a ser.
De entrada pareciera una niña caprichosa o malcriada, pero… Ya veremos que es un ser muy especial.
Todo viaje es un reto, especialmente una mudanza. Estudios psicológicos han determinado que una mudanza, trae a la vida mas estrés que un divorcio, si es un cambio de ciudad o país, se va incrementando potencialmente. Así que pongámonos en su lugar, y acompañémosla, porque ella va a tener un “viaje”, es decir, un cambio mas profundo de lo que nadie podría imaginarse.
Chihiro no quiere el cambio, le gusta lo que ya conoce. Le teme a lo nuevo, prefiere la comodidad de su rutina anterior. También por la edad podría verse como el cambio que da el niño al adulto, la complicada adolescencia.
Este inicio recuerda el dicho oriental: “un gran viaje comienza con un solo paso”. Cada acto que hacemos nos lleva a algún lugar, usualmente nos sorprendemos, y con demasiada frecuencia es una sorpresa desagradable, a donde nos llevan los pasos que damos, pero esto es solo porque no sabemos ni a donde queremos ir, ni como llegar, simplemente caminamos sin pensar, como zombies. Si queremos llegar a un sitio hay que planificar el viaje en cada uno de sus pasos.
Chihiro no guía este viaje, es arrastrada a el por sus padres. Tiene que obedecer por ser chiquita. Pero luego los padres hubiesen evitado tantos problemas si la hubiesen escuchado. Porque al parecer ni ellos saben a donde van. El padre por acortar camino se pierde. Y termina en lo que el cree que es un atajo. Es interesante ver como, por su afán de dominar la situación, no escucha a nadie, pero menos aun ve las señales que están a su alrededor.Chihiro si, porque ella no maneja, ella esta siendo llevada, no tiene control, por lo que puede concentrarse en el camino, en los detalles. Esta es la mentalidad del ZEN, del dejar fluir, del dejar pasar, de no desear control o poder, así se puede sentir la verdadera conexión con el aquí y el ahora. Por eso a ella algo le dice que por donde van no deberían ir, pero nadie la escucha. De alguna manera sus padres, podrían ser vistos como la vida, que te pone en situaciones en las que no deseas estar, pero que te toca afrontar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario